jueves, 26 de octubre de 2017



La globalización es el sistema en el cual las naciones están interconectadas entre sí, las barreras que marcan los territorios de los países desaparecen, se pierden y nos unen a todos desde un punto de vista económico, comercial y político. Intenta englobar a todo ser humano independientemente del lugar donde se encuentre, es un instrumento que tienen los mercados con la finalidad es maximizar beneficios.
Los medios masivos de comunicación son el factor más importante en la globalización, ya que sin ellos esto no sería posible, nos intentan convencer (finalmente lo terminan haciendo) de todas las cosas favorables (ventajas) que posee, y nos muestra que también tiene desventajas (mínimas). Cuyos nos repiten desde la niñez (donde el ser humano es más influenciable) hasta la vejez y nos atrapan en su "juego" mostrando sus ventajas, como por ejemplo aumentar la cooperación internacional frente a determinados problemas, la circulación de bienes y productos importados, disminución de la inflación, desarrollo tecnológico, étc. Aunque la globalización también tiene sus riesgos, existe el llamado "patriotismo", es muy difícil que una persona se sienta más identificado con los problemas que surgen en una región que está a 10.000 km de de la suya que con los problemas que suceden en la ciudad vecina. Además, desgraciadamente, crea un aumento de desequilibrios económicos entre los distintos grupos sociales, los ricos son cada vez más ricos, pero los pobres son más pobres. Algunos economistas sostienen que es la principal causa del aumento de desempleo.
Un ejemplo claro de globalización es Halloween, porque consumimos lo mismo cuando nisiquiera es una tradición nacida acá, y sin embargo la festejamos por más que no tenga que ver con nuestra cultura. Consumimos lo mismo.

¿Todos somos iguales?

Todos somos iguales porque tenemos los mismos derechos y, a la vez, todos tenemos diferencias que forman parte de nuestro origen o de nuestra historia personal. Cada persona tiene sus propias emociones, cultura, lengua, en fin, una serie de valores que conforman la propia identidad. Cada persona es una ser único. Los hombres y las mujeres, en tanto que seres humanos, somos iguales, y esto hace que tengamos las mismas necesidades y los mismos derechos: a la educación, al trabajo, a un trato digno, a ser valorados, al respeto a nuestras ideas y decisiones, a ser libres. Pero nos diferencian nuestras costumbres, nuestra forma de vestirnos, nuestros gustos, la forma de hablar, de pensar, las creencias religiosas, la edad, e incluso aquellas cosas en las que cada uno de nosotros destaca por encima de los otros. Y todas esas diferencias nos hacen ser personas únicas. Pero lo que a mí me parece evidente es que, por encima de todas las diferencias, nuestro valor como personas es el mismo.